martes, diciembre 11, 2007

El Hijo de Caín


I
¿Quién es bendito en esta tierra?
Aquel que sonríe en medio de la turba hipócrita
Que anda en medio del cauce del río colectivo sin saltar de la corriente
Maldito me han llamado...
Solitario y envejecido
El abandonado del tiempo y de las emociones...
Emancipado del sentir humano y del transitar de la tierra de lo perdido

II
¿Quién es maldito en este plano?
Quien ante la falta de motivo no sonríe complaciendo a los rostros vacíos
¿Cuál es la mano de las cartas de los malditos?
Cada As marcado en el carmín de los labios de Lilith
Un alma perdida...
Andando sin rumbo en los desiertos de la soledad, acampando en las montañas de las áridas ilusiones perdidas...
Como única melodía mi voz....

III
Padre...quécopa me haz legado...
La sangre derramada, inmortal alimento, causante de tristezas y desvelos
¿Por qué me bendices con la vida entre los mortales pero maldices mi reinado con la soledad?
Colectores de almas etéreos rodean las calles oscuras de junglas muertas de concreto
Te busco....¿dónde estás?
El único paraíso que he conocido
La única princesa que ha sido un sueño verdadero.
Relicario que vela mi camino eterno...

IV
Fuiste bendecida en mi amor, con mi sangre en tus labios
Princesa cuando los reinos del deseo, placer, ternura y lujuria fueron uno dentro de ti.
Pero con el amanecer y la llegada de la luz transfiguró todo...
Fuiste la diosa de mis pesadillas, predadora que en tierras de Morfeo acosó mi paz
Ahora sólo eres tú, mortal y hermosa...
Ya no tienes mi beso inmortal,
Y mientras, sigo recorriendo tus valles de soledadAndando sólo este camino buscando una verdad.

1 comentario:

J. L. Maldonado dijo...

Visita de cortesía sobre tus versos. Me quedé en el aire, cosas de la poesía...