viernes, noviembre 30, 2007

Tu Ausencia

I
¿Qué me dijo tu ausencia?
Silencio
Escuché rumores de ejércitos muertos, de estandartes caídos,
De sueños lejanos

II
¿Qué me dijo tu ausencia?
Un susurro...
Adiós
Los edificios derrumbados se precipitan sobre los inocentes.
El miedo es omnipresente y tu recuerdo embriagante.

III
¿Qué me dijo tu ausencia?
Palabras
Sonidos inertes en la bocanada de la soledad.
El imaginario desata un circo sádico, cruel y torturador de los sueños,
Sueños enervados con veneno

IV
¿Qué me dijo tu ausencia?
El sol se levanta.
Resígnate a lo inalcanzable.
Tus defectos son mayores,
La bendecida diosa se aleja y yo sin poder tocarla,
Sus ojos apasionados me dejan.

V
¿Qué me dijo tu ausencia?
Gritos
La noche se va y tu lejanía me insulta
Degrada una alteración sensorial, una idealización del arte de la creación.
La luz se apaga


VI
¿Qué me dejó tu ausencia?
Luz y oscuridad

jueves, noviembre 29, 2007

Portal


Y esa noche....le hice el amor a la locura


I
¡ME DESTRUIRÉ!
A los veintisiete ya será,
Estaré ido cantando con Morrison,
Estaré ido bebiendo con Janice
Estaré ido tocando con Jimmy
Brian seguirá sirviendo los tragos
y Kurt disparará las ideas del big bang final

II
No me odio pero quiero ser amado.
“Es más fácil morir que vivir”
¡ESO DICE EL EXTRAÑO!
Pero aún no renunciaré,
luchare mientras pueda.

III
Quiero irme de aquí, ser libre para morir.
Dejar mi ser, volver, irme...estar.
Soy cobarde y ebrio,
me odiaré por eso,
IDIOTA

IV
El fin como meta.
No importa, sólo cuenta estar solo.
La emancipación de la vida, la muerte, me iré,
porque sólo nací y sólo moriré

martes, noviembre 20, 2007

La Durmiente


I
Despierta bajo el manto de la dormidera y bajo la humedad del sol que oscurece el diario elixir...
Prueba en la punta de tu lengua el brebaje mágico, bálsamo del armario alquímico de una memoria perdida en el poniente de Morfeo
Mientras los párpados se desnudan con el son de un rocío delirante del beso perdido y la lágrima que recorre el satín de tu mejilla...
Para perderse en el rumor del vacío llamado ausencia y anhelo.
Nubes de tormenta.

II
Eres la durmiente, yaces en lo perdido de la memoria, en la tumba de mi odio, en la cuna donde nació el amor....
Eres durmiente porque tu ausencia deja áridos paisajes donde la compañía rompía el balance de las montañas
Donde tu cama conoció mi rostro, tu piel mis caricias y el viento tu aliento que transpira junto al mío y aún así, hacen el amor....
Despierta del sueño eterno donde te sumiste, aleja la pesadumbre de un láudano elegido y derramado.

III
Bebe el coctel del ajenjo en mis labios, no mires mientras estas conmigo, deja que mis manos se vuelvan mensajeras del placer y mi lengua sólo profesa el lenguaje que entiende la venus de tu cuerpo...
Obra de extrañas formas la luna cálida que se filtra en la ventana, la luz que ondea al ritmo de nuestro vaivén...
Las fraguas del averno, la galaxia que se mueve, el cielo delirante, la mirada de la durmiente, el deseo en los amantes...

IV
Luces de neón que filtran los cocuyos de una selva de concreto
Ya que no eres una durmiente, conviértete en una ninfa sedienta de descubrir, en una ninfa traviesa...
Como un predador recorreré tu praderas, rumbo a palacios de calor y placer...rumbo a las cimas de dulces cúspides sensibles al opio del tacto...
Excitación de los sentidos, exaltación de ambos seres conjugados en un beso, derrumbe de las guardianas del tesoro y finalmente el peregrinaje al paraíso con anhelos de descubrimiento
Como un conjuro recitemos el ritual donde dos son uno y el uno se pierde para ser un todo.
Seguido todo de...silencio

V
Relájate, tú la durmiente, la tormenta ha pasado
La sonrisa colma los rostros de plenitud...las nubes parecen dispersarse
Sólo queda el abrigo de la piel y el calor de los sentimientos,
Princesa durmiente, refúgiate en mis brazos para recuperarte del suceso
Que a mi resguardo estarás segura, haz lo que quieras en mi lecho...
En mi mirada podrás ser la vida o la muerte, presente o ausente
Podrás ser calma o ardiente, hablante o silente,
Siempre serás mi princesa, la durmiente

lunes, noviembre 12, 2007

El Payaso

I
Una vez más salta el payaso a la pista
Con maquillaje blanco de sonrisa disimula tristeza
Hace reír a sus colegas y amigos, hace reír a un Dios y un demonio que juntos se dan la mano
Sus zapatos grandes esconden los pies pequeños de un ser humano sensible al que se le exige
brinca payaso que salta pronto un tigre....
no dejes que el fuego te toque otra vez y saborea un pastel de falsedad servido entre sonrisas..
¿tienes corazón?, alguien te lo ha preguntado
o esa lágrima que amenaza es solo imaginación...


II
Pobre payaso, en silencio tiene que soportar la desdicha de cada actuación...
Dar lo mejor de ti, esforzarte cada día, solo para escuchar que se ríen de ti...no contigo
Con sus manos enguantadas lanza los aros de fuego que salen de su cabeza
Con su nariz de corneta es capaz de hacer soñar...
“¡payaso, eres tan especial!”, te suelen decir....
tan especial para divertirme pero no para vivir....

III
Siempre es la misma función, con espectadores de caras negras y solitario en medio de la pista...
Con heridas ocultas bajo la pasta blanca y deformadas por una sonrisa forzada se ocultan miles de historias y sueños...
Ilusiones muertas por el espectáculo cuya tristeza deja cicatrices indelebles sumergidas entre cabello verde...
Resulta que el payaso también es confesor....
Cada niño le cuenta lo que quiere para su vida y él lo alienta a soñar, a vivir...
Cuando detrás de su máscara desea morir...

IV
Ah, Payaso, también eres domador de sentimientos...
Como subyugas el miedo del día a día...
La ira de cada decepción...
El odio ante dioses ausentes que se llaman omnipresentes...
Como flota la risa falsa entre la oscuridad y globos de colores...
Baja tu cabeza en la despedida payaso, honra a tu hipócrita audiencia...
Sólo pocos te han visto sin tu careta...

V
El final de la noche...
Donde la sinceridad se rinde ante la soledad
Donde la verdad del olvido emerge....hay que aprender a olvidar y a ser un olvidado...
Bajo tenue luz de la mesilla la careta cae, los guantes se van, y vuelves a ser tú.... De rostro dulce y triste, de manos suaves y solas con alma de amante, poeta y príncipe...
No importa si eres de la realeza, humano, ángel o demonio....
Si hay algo cierto en este mundo es que todos somos payasos.

viernes, noviembre 09, 2007

La Bóveda y la Guerra

I
Regálame una sonrisa para poder ver a través del cristal
Regálame un corazón que permita hacer el latir del olvido en las venas
El secreto de la ausencia y el tiempo es la recompensa de la nostalgia
Memorias ausentes de un recuerdo florido y calmo flotando en nubes suaves y eléctricas
Abrazado por las olas de un mar tormentoso que cae en el sueño arropado en mármol
El frío de una catacumba espiritual aniquila el aliento de la vida
Entre las tierras del silencio y la desolación navega Caronte llevando a los valientes que se atrevieron a sentir amor
Que se atrevieron a ser humanos

II
No permitas que los recuerdos escapen
Agrúpalos en una vitrina abovedada de vidrio hermético y silente
Cerrado entre dedos secos y firmes donde el latir no perfore el alma y congele las raíces del sufrir
Bajo siete sellos hunde ese amor marchito que ahora es etéreo
Con seis brazos recibe las dádivas de la esperanza fruto de destrucción del pasado.
GUÁRDALOS....
NO LOS DEJES SALIR,
las memorias son Gorgonas hambrientas
y los recuerdos son duendes impuros y peligrosos...
devoradores de presentes y castradores del futuros

III
Ah¡. El spleen, la agonía del día a día.....
Que sensación tan familiar fuiste....
El anhelo de la paz de la tumba
En medio de tinieblas pude descubrir la luz que sostenía mi propia mano y que manaba de mi alma, junto a mi sombra
En la tundra de la soledad, mi reino, descubrirás que todo fue superficial...
Que el viento que arrullaba tu caminar era mi voz a tu oído
Pero ya no lo tendrás, ni viento, ni suelo porque el que andar...
Sólo el regalo del recuerdo guardado, desde donde sólo podrás mirar.

IV
En la guerra sensorial que con cada fulgor se desata fui un ángel caído
Con mis alas rotas, carcomidas por el sol y la sombra me alzaré
Porque aunque tu aliento y tu piel sean como la espada encarnada,
porque aunque en algún momento te des cuenta de lo que perdiste y llores...
Esa herida no me impedirá avanzar porque no existes, moriste en batalla y tu corazón no pesó tanto como para salvarlo en manos de Anubis
Mi único recuerdo sobre ti...
Será el olvido

lunes, noviembre 05, 2007

La Fortaleza de mi Alma


I
Ante el oscuro castillo te detuviste
Solicitaste entrada muchas veces y te fue negada
Pero con regaños, besos y caricias lo conseguiste
Y te bajé el puente

II
Conociste las piedras con las que escudé mi espíritu
Viste las cadenas con las que até mis miedos
Y bebiste de los pozos donde ahogué mis llantos...
Sin asustarte decidiste quedarte,
Me amaste
Aunque por un tiempo

III
Que dos inviernos y tres veranos consumieron el amor que nos prodigábamos
Y en la luna busco los fantasmas que flotan en el coma de los sentimientos
La fortaleza está sola

IV
Quitaste algunas piedras y liberaste mi alma
Ya no hay cadenas, sé lo que es temer..
Temí perderte
Mis llantos inundan los pozos y los desbordan
Decidiste irte
Me enseñaste a amar
Te enseñé a compartir
Me enseñaste a llorar
La fortaleza aún existe, vacía, inerte, palpitante...
Solitaria por el momento...
Espera su siguiente viajera
Pero aguarda a que esa Saltimbanqui que me enseñó a sonreir vuelva.

viernes, noviembre 02, 2007

Necrópolis

Foto: Mauricio Lairet / mauricio.enredes.com

I

Algunas ánimas son sutiles y voraces ante el existir
En Metrópolis de mentes desiertas habitan con rostro vacío
Con andar lento de prisa mortal sus pasos dañan la faz de un hogar profanado
Hipocresía macerada del corazón antiguo nubla la razón de un ser llamado “evolucionado”.
El único salvador del pecado no será un Dios, no Alá, no será Satán ni Buda....
Mírate en el espejo del tiempo de la vida y reconoce que sus arenas caen con cada lágrima que brota del corazón sangrante.

II

Tormenta se cierne sobre la calma del mar cercano a la isla del alma
En jungla de concreto los predadores acechan la inocencia que con ojos calmos se pasma ante la agresión y un ademán de acecho acelera el corazón
Maldito el villano que profana la doncella y nubla su corazón con palabras del impío hablar,
Su cuerpo desmembrado resarcirá la ofensa y su alma atormentada por eternidad en sulfuro pagará el castigo....
Maldita Ciudadela de corazones muertos....

III

La rueda de la fortuna gira con sádica policromía donde las manos rozan
la piel abandonada a los placeres del exceso
Y el veneno fluirá en las venas de los cadáveres insepultos mientras la podredumbre carcome su existencia...
Drama es el que sufren los vivos que en medio de la necrópolis habitan...
Saben que un corazón que vive, que ama, que llora y que lucha por la sinceridad es devorado por los muertos...
Desechado a la iniquidad del olvido y procesado en amasijo de hierros.
Y pretenden en la cruzada de la iniquidad purificar el cuerpo con fuego.

IV

Adiós, la noche trae juramentos de éxtasis
Las amazonas esperan para comer mi carne y beber mi sangre, pretenden mi alma....
Mi alma muerta que cerró sus ojos para siempre ante el engaño y en profundo sopor espera el regreso de la verdad....
El regreso de la vida a esta necrópolis olvidada en el ensueño de un poeta